Mi hija no lleva pendientes
El artículo que te traigo hoy hace ya unos meses que lo escribí, pero siempre vuelvo a encontrarme con situaciones o comentarios que me remiten a él… Tiene que ver con los roles y estereotipos que asumimos por vivir en sociedad, y sobre cómo somos parte de ellos y los reproducimos de forma inconsciente.
Hace falta un replanteamiento de los mandatos que nos imponemos ya que somos responsables también de que se sigan reproduciendo usos y costumbres muy arraigados, poco analizados y dañinos para la salud de nuestro mundo, en todos sus estados presentes: el general, de la sociedad en la que estamos inmersos; el local, del grupo que nos rodea; y del personal, al cual rodeamos con nuestro propio ser.
La armonía se plantea necesaria y nace de la revisión desde y hacia el cerebro y el corazón.
En ‘Mi hija no lleva pendientes‘ te cuento una experiencia concreta, pero extrapolable a tantas otras que vivimos diariamente, con la conciencia ausente, la mayoría de las veces.
Te espero por el blog.
Eva
Gianella, me parece un artículo muy valiente, así como la decisión y coherencia que hay detrás. Muchas veces me he planteado qué haría con este tema si tuviera una hija… y me has ayudado a continuar la reflexión. Enhorabuena, y gracias por abrirte y compartir la experiencia.
Mari
Pobre niña , tumores ala que tiene dudas de su sexualidad tal vez y se la trasmites a la bebe